Cuando llega el momento de tomar la decisión de hacerse con un vehículo, no todo el mundo ve con buenos ojos la compra. De hecho, cada vez son más las personas que encuentran una alternativa válida en los productos de 'renting', una modalidad de alquiler a largo plazo que el pasado año concentró el 20% de las nuevas matriculaciones españolas. Por su parte, el 'leasing', una fórmula de arrendamiento financiero con una opción de compra final por parte de la empresa, registró en 2018 un total de 7.865 millones de euros de la inversión que llevaron a cabo las compañías nacionales, lo que supuso un aumento del 10,4% con respecto al ejercicio anterior.
El leasing registró en 2018 un total de
7.865 millones de
euros de inversión
Se trata así de dos prácticas en auge en España dada la gran cantidad de beneficios que presentan. El ‘renting’, por ejemplo, cuenta con la gran ventaja de que en el pago de las mensualidades se incluyen todos los gastos derivados del uso del coche tales como las reparaciones, el seguro o los impuestos. Probablemente debido a este factor este tipo de productos han experimentado un crecimiento importante en los últimos años, con unas matriculaciones que, aunque todavía son inferiores a los números previos a la crisis, ponen de manifiesto un aumento anual mayor que supera el de la recuperación económica del país.
A la hora de elegir los modelos de estas transacciones se valoran conceptos como el confort, la fiabilidad, la facilidad para encontrar repuestos, la oferta de mecánicas eficientes y que el vehículo en cuestión mantenga un alto valor residual. En este sentido, cabe destacar que los gastos variables del ‘renting’ son menores, pues el pago de las cuotas fijas incluye las prestaciones citadas anteriormente, y que esta modalidad premite cambiar de coche al terminar el contrato, que tiene una duración habitual de entre uno y cinco años.
El caso del ‘leasing’ también ofrece una forma de financiación muy ventajosa por la que se puede usar el bien y decidir después de unos años o meses si finalmente se quiere comprar o no. Una práctica que permite financiar el 100% de la inversión en unas operaciones que no forman parte del riesgo comercial financiero a efectos bancarios porque no se realiza la compra del bien. Asimismo, aporta la posibilidad de disfrutar de una gran flexibilidad y rapidez para obtener una renovación tecnológica de los equipos o flotas de vehículos.
Se trata, en suma, de una gran oportunidad para financiar las inversiones en inmovilizado de una empresa.
LA CUESTIÓN FISCAL
El aspecto de la fiscalidad es otro de los puntos más destacados de ambas operaciones. Así, con el ‘leasing’ se pueden obtener importantes ventajas, ya que el valor de las cuotas de amortización puede tomarse como gasto tributario, por lo cual el valor total de la maquinaria o equipo puede deducirse como gasto, a excepción del pago del valor residual del bien.
En lo que respecta al ‘renting’ la fiscalidad es altamente favorable tanto para los trabajadores autónomos como para las sociedades mercantiles. Esto es debido a que el importe de la cuota mensual que paga la empresa o el autónomo por este concepto es deducible en su totalidad porque se considera un gasto de la compañía, siempre y cuando sea necesario para el desarrollo de su actividad. En cuanto al IVA aplicado en la cuota mensual es igualmente deducible al 100% en los casos en los que el arrendatario del coche de ‘renting’ dedique el vehículo exclusivamente a la actividad profesional o empresarial.
EL PLAN QUE IMPULSA LOS COCHES ELÉCTRICOS
Además de las múltiples ventajas que los productos de ‘renting’ conllevan para la economía de las empresas, su adquisición también acarrea notables beneficios para el medio ambiente. Así, constituyen unos importantes impulsores de los vehículos eléctricos (eléctrico puro, de autonomía extendida, híbrido enchufable gasolina e híbrido enchufable diésel), pues el 33,5% de las matriculaciones de este tipo de automóviles registradas en los tres primeros meses de 2019 las ha llevado a cabo el ‘renting’. Cabe destacar asimismo que los vehículos eléctricos aún plantean interrogantes en diversos sectores de la población, los cuales aún no tienen claro si es la opción que más le conviene en función de sus diferentes necesidades de movilidad. Una incertidumbre que no es tal cuando pueden disfrutar de este tipo de vehículos en la modalidad de ‘renting’. Además, los híbridos también están ganando peso en el parque de este tipo de modelos, y en el acumulado a marzo supusieron el 5,36% del total de las matriculaciones de esta modalidad, más del doble que a marzo de 2018.
UN ÚLTIMO EJERCICIO CON DATOS HISTÓRICOS
La Asociación Española de Renting de Vehículos (AER) presentó el pasado mes
de enero los datos completos de la evolución del ‘renting’ durante el año 2018.
Un periodo en el que el parque de automóviles de esta modalidad en España se
elevó a 629.260 vehículos, cifra que refleja un crecimiento del 14,05% en
relación a los datos de 2017, cuando se registraron 551.730 unidades. Agustín
García, presidente de la entidad, señaló que estos datos corroboran la excelente
marcha del sector en el país, pues «el ‘renting’ está viviendo el mejor momento
de su historia en España, tanto cualitativa como cuantitativamente».
En cuanto al peso que tienen los diferentes tipos de clientes en el parque de
estos vehículos, cabe destacar que la pequeña empresa y las personas físicas
(autónomos y particulares) continúan ganando presencia. Así, estas últimas
incrementan su peso en 3,15 puntos porcentuales y hasta llegar al 8,78%;
mientras que las pequeñas compañías aumentaron 1,63 puntos alcanzando el
19,58% de representación sobre el total
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